¿Hay algo difícil para Dios?

 Yo soy el Señor, Dios de todo ser viviente. ¿Acaso hay algo que sea difícil para mí?

JEREMÍAS 32:27 RV2020

 ¿HAY ALGO DIFÍCIL PARA DIOS?

1. Necesitamos conocer Quien es Dios realmente. Él se presenta a nosotros como el único Dios para Quien no hay nada imposible. Nadie puede detenerlo. Ningún plan suyo puede ser frustrado. Este tipo de conocimiento ¿cómo nos afectaría en nuestra vida? Sin duda disfrutaríamos de gran paz y confianza en Dios. Imagina ser PLENAMENTE CONSCIENTE del absoluto poder y control de Dios, saber que nada escapa a Su voluntad, y que sus planes siempre se cumplen, que nadie puede frustrarlos. ¿No viviríamos en completa paz, no oraríamos con más frecuencia y fe?

2. Él es el Dios de TODO Ser viviente. Dios no es una opción para ninguna criatura. Si Él es Dios merece nuestra adoración y gratitud. Si Él es Dios no tiene que dar explicaciones, pero nosotros sí que le debemos explicaciones. Él es el Juez de todo ser viviente, a Él vamos porque suyos somos. ¿Estás listo para encontrarte con Dios? ¿Has preparado tus cuentas, sabes bien cuál es el saldo de tu vida?

3. Nuestra existencia cobra sentido en la medida en que estamos relacionados con Dios. ¿Gira tu existencia en torno a Dios? No se trata de ser religioso, sino de ser un adorador. Desde la mañana hasta la noche cada hora late con el corazón de Dios. Nuestro gozo como seres humanos es vivir con los ojos del alma mirando al Sol de nuestra felicidad. La oración continua, y la oración en marcados momentos del día son forma de girar nuestro ser hacia Él, la meditación en Su Palabra y el asombro constante nos devuelven ante Su presencia. Necesitamos re descubir cómo vivir vidas de gozosa contemplación de Dios.

4. Debemos alimentar nuestra confianza y nuestra esperanza en las promesas que Dios nos ha dejado en Su Palabra. No hay nada difícil ni imposible para Él. Este largo invierno que la navidad sin Dios está sufriendo llegará a su fin y el Deseado de las Naciones vendré para reinar para siempre. Anhelamos ese día. Meditemos en el Reino que de venir y vivamos ya como ciudadanos bajo la autoridad de este Rey de gloria.