sábado, julio 20, 2024

La fiesta del Reino


[1] Respondiendo Jesús, les volvió a hablar en parábolas, diciendo: [2] El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo; [3] y envió a sus siervos a llamar a los convidados a las bodas; mas estos no quisieron venir. [4] Volvió a enviar otros siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, he preparado mi comida; mis toros y animales engordados han sido muertos, y todo está dispuesto; venid a las bodas. [5] Mas ellos, sin hacer caso, se fueron, uno a su labranza, y otro a sus negocios; [6] y otros, tomando a los siervos, los afrentaron y los mataron.


S. Mateo 22:1-6  RVR1969

El Reino de Dios es una fiesta, mejor aun ¡una gran fiesta preparada por un gran Rey! si la fiesta de un hombre rico es algo grandioso, la fiesta de un gran Rey es algo incomparable, ¿quien no querría ser invitado a la fiesta de un gran Rey? la gente haría lo que fuera por ser invitados a un evento así, y no sólo por el honor de ser invitado, sino el disfrute de los placeres y la diversión de algo así. Piénsalo, dale la espalda a una oportunidad así con una excusa tan tonta como "tengo que ir a sembrar calabacines" es una locura.
Esta es la historia que el Señor Jesús nos cuenta, una de esas historias ante las cuales nadie se queda indiferente, imagino que algunos de los oyentes se levantarían diciendo: ¡pero qué tontos son! ¿cómo se les ocurre despreciar una invitación semejante? Y ahí es donde el Señor Jesús nos pilla: tú y yo le hemos dado la espalda a Dios y a su invitación.  Los tontos somos todos nosotros.
2. La naturaleza de esta fiesta. ¿Alguno ha pensado que el Cielo es un lugar aburrido? o peor aun ¿alguno ha pensado que Dios es alguien aburrido? las cosas divinas son placenteras más que cualquier cosa de este mundo, pero nuestro pecado nos impide discernir la realidad del gozo que hay en Dios. En su presencia hay plenitud de gozo. Buscamos a Dios en todos lados, ¡menos en Dios! y por eso siempre estamos insatisfechos.
3. La naturaleza de la invitación. Es sorprendente que el Dios que nos han beneficiado tanto, y al que tanto hemos ofendido, nos ofrezca, nos invite a una fiesta tan íntima. Normalmente tú invitas a tus amigos cercanos, no invitas a desconocidos, ¡y menos a tus enemigos declarados! por otra parte la gente rica invita a personas de su nivel social y riqueza, esa gente se avergüenza de tener amigos pobres (hablo en general). Pero Dios, Quien es rico más allá de todo parámetro humano, nos invita a nosotros, que somos pobres en comparación con Él (más allá de todo parámetro humano). ¿Quien es este Dios asombroso?
4. Esta historia es una invitación en sí misma. Dios nos invita a nosotros a disfrutar de todo cuanto tiene. Dios nos invita a disfrutar de Él, a comer y beber con Él. ¿Qué hay que pueda compararse a Él?
Aquellos que hemos creído cada día tenemos la oportunidad de tener banquete con Dios, de entrar en esa fiesta y disfrutar del Rey, pero en nuestra condición caída pensamos que hay asuntos que merecen más importancia. Que el Señor abra los ojos de nuestro entendimiento y nos permita discernir la realidad de su gozosa presencia, de los íntimos tratos, del pastoreo celestia, de su consuelo divino. En Betania Jesús cenaba con Marta, María y Lázaro, a ellos les unía una profunda amistad, podían sentarse a los pies de Jesús y ser enseñados por Él. Si eso te produce envidia (a mí me da mucha envidia) que sepas que cada día puedes abrir la Palabra de Dios y por medio del Espíritu Santo dado por el Salvador resucitado, tener comunión con Dios. Y también sabemos que Dios tiene un Reino eterno para los suyos, donde nos sentaremos a su mesa, tenemos una ciudad celestial en la que no hay Templo, porque el Señor es el Templo.
Oramos: Señor, abre los ojos de mi entendimiento, límpiame de todo aquello que me impide ver que Tú eres mejor que la vida misma. Que mi aprecio por las cosas divinas sea mayor, que mis gustos y anhelos espirituales crezcan, porque tu abundancia suple los anhelos más grandes. Te damos gracias por nuestro bendito Señor Jesucristo, el consumador de la fe, el vencedor de la cruz, el ganador frente al diablo y la muerte, nuestra justicia y garantía de perdón. Confiamos en Él, ¡mata en nosotros todo aquello que nos impida correr en pos de Él!

viernes, mayo 17, 2024

El miedo a las conspiraciones


 EL TEMOR POR LA CONSPIRACIÓN


“No llames conspiración a todo, como hacen ellos,

    ni vivas aterrorizado de lo que a ellos les da miedo.

Ten por santo en tu vida al Señor de los Ejércitos Celestiales;

    él es a quien debes temer.

Él es quien te debería hacer temblar.

Él te mantendrá seguro”.

Isaías 8:12-13a NTV


La mentalidad de los cristianos hoy es la fascinación por ocultas teorías de la conspiración, grupos de poder en las sombras, élites que gobiernan con malvados planes. Este es el único tema de conversación en foros y determinados círculos, analizando lo que dicen pareciera que no tienen más temor que a la conspiración, ni atribuyen más soberanía que a las élites. Nuestro temor reverente debería ser a Dios, Él es Quien tiene todo el poder, Él es quien rige el destino de las naciones y de la historia, podemos confiar en aquel que tiene el poder real, y cuya voluntad se cumple.

2. En el centro de todo está nuestro temor. Sólo temes al que tiene el poder, el control. Un cristiano puede decir que “cree” en Dios, pero teme a los enemigos del evangelio, teme a la muerte, teme al Estado represor, lo cual sólo puede significar una cosa: su idea de Dios es insignificante, es una persona ignorante del Dios de la Biblia, desconoce Su poder, el alcance de Su soberanía, en definitiva, ignora al Dios de la Biblia. 

3. El temor es más que miedo. Cuando la Biblia habla del temor de Dios no lo dice en el mismo sentido del temor de los demonios a Dios. En el amor de Dios no hay terror, el temor de Dios es el conocimiento de la majestad y poder de Dios. Dios no es sólo admirable y digno de amor, también lo es de temor. Si el creyente no respeta a Dios es que su concepto de Él es de un sirviente de sus deseos, alguien al que pedirle cosas, o con quien negociar.

4. Sólo podremos tener paz cuando nuestro conocimiento de Dios esté interiorizado, cuando no haya conflicto entre nuestra cabeza y nuestro corazón, cuando nuestras ideas y nuestros sentimientos estén reconciliados. Esa plena coherencia entre lo que sabemos y lo que sentimos significará que el Dios de la Biblia reina en todo nuestro ser. 

5. El problema de nuestro cristianismo es que Dios no está en el centro del mismo, preferimos las distracciones, los pasatiempos, las cuestiones secundarias nos fascinan. Es ese descuido de Dios el que llevó a la nación de Israel a la ruina moral y espiritual, y es el que nos aqueja a nosotros, si ellos escuchaban a agoreros y a los que consultaban a los muertos, nosotros estamos pendientes de cuentos y conjeturas que las películas de Hollywood nos han presentado, desde catástrofes cósmicas, plagas, desórdenes y planes de una élite. Nos distrae contemplar aquello que nos trae temor y no a Aquel que nos da paz, igual que Pedro miraba la tormenta y se hundía, en lugar de mirar a Jesús, que es Quien tiene poder sobre las tormentas sólo con Su palabra. 


viernes, abril 05, 2024

La falta de dominio propio

 ”Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al diablo.“

‭‭Efesios‬ ‭4‬:‭26‬-‭27‬ ‭


La pérdida de control da lugar al diablo porque es la ausencia de dominio propio. Dios nos llama a tener el control en todo momento de nuestra lengua, pensamientos, emociones y acciones. En el momento en el que no hay dominio propio hay un vacío de poder que el diablo aprovecha para hacer su obra de destrucción. 

martes, marzo 19, 2024

Apocalipsis, promesas para la vida


 Dios nos ha dado promesas para que podamos vivir vidas cristianas gozosas, perseverantes, santas y resistentes. 

Charla 1: El mensaje a Filadelfia. ¿Qué es un cristiano de éxito y cómo lo definimos? a los ojos de Dios el éxito se basa en la perseverancia y en la fidelidad, por eso Dios nos ha dado promesas que nos sostienen e impulsan a vivir así.

Charla 2, Apocalipsis 4: Necesitamos tener una visión de Dios nueva en la que su poder y soberanía queden patentes y así poder enfrentar. Juan en Apocalipsis 4 recibe una visión del trono que le fortalece ante los juicios que verá en los posteriores capítulos, nosotros también necesitamos conocer al Dios que es soberano y cuyo plan es imparable.

Charla 3, Apocalipsis 17 y 18: Uno de los grandes enemigos del creyente es la seducción, esta artimaña busca enfríar y arruinar la vida espiritual del creyente con las falsas promesas del mundo, pero ¡Dios tiene mejores promesas para que por medio de ellas seamos vencedores!


Apocalipsis, promesas para vivir

Sesión 1:https://youtu.be/WPGcZrr0nOA

Sesión 2:https://youtu.be/0D4eVuXEGLc

Sesión 3: https://youtu.be/jF7Kuh2sdTU


Julio Martínez es co pastor en la iglesia cristiana evangélica en Suanzes, además de podcaster, predicador, escritor, redactor en Edificación Cristiana y empleado de una empresa de tecnología. 

www.estudios-biblicos.org

martes, febrero 27, 2024

Glorificar a Dios en toda situación




“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios”.

1 Corintios 10:31 RVR1960


Nuestra idea es que glorificar a Dios es servir a Dios de manera cúltica, por medio de la música o la predicación de la Biblia. Pensamos que aquellos que más glorifican a Dios son los misioneros y los que están implicados en los servicios religiosos, es más, creemos que si alguien aspira a una forma más elevada de servicio, lo ideal sería abandonar su trabajo y buscar una ocupación religiosa. Pero no es así, nuestro texto nos enseña que podemos glorificar a Dios con todo lo que hagamos. Incluso cosas tan sencillas como el comer y el beber.

2. Dar gloria a alguien es exaltar su persona, y darle un tributo excelente. Por ejemplo, damos gloria a un representante de otro país vistiéndonos de gala, ofreciendo un banquete, y dándole regalos magníficos. Por el contrario, nadie pretende honrar a un representante de otro país vestidos pobremente, y ofreciendo una comida sencilla. Ofrecemos lo mejor a quien consideramos que digno de ello. De la misma manera honramos a Dios buscando la excelencia en todo lo que hacemos, porque lo hacemos para Él.

3. Hacerlo todo para la gloria de Dios es buscar la excelencia en el detalle, siendo conscientes de que todo lo hacemos para Dios. Si nuestro trabajo es sencillo, limpiando las calles, buscaremos hacer un trabajo brillante, pensando que ese es nuestro tributo a Dios. Si nuestro trabajo es servir a otros, haremos un trabajo excelente, sirviendo con cuidado y esmero, con entusiasmo y gozo, haciéndolo para el Señor. Dios está interesado en un trabajo excelente. Decía Lutero que un zapatero cristiano no es aquel que escribe versículos en las suelas de los zapatos, sino el que hace zapatos excelentes, porque Dios está interesado en los zapatos, ya que está interesado en nuestro trabajo.

4. Pensamos en lo que no es nuestro trabajo, el resto de nuestra vida, nuestro hogar, nuestras relaciones con otras personas, el uso de nuestro dinero, nuestro descanso, nuestros pasatiempos y cuando comemos y bebemos. Todo debe dar gloria a Dios, buscando la excelencia en todo lo que hacemos. No podemos hacer las cosas con descuido, sino buscando una intención clara: honrar a Dios. La gente que no conoce a Dios pierde el tiempo y se distrae de cualquier manera, nosotros debemos buscar un entretenimiento excelente, de calidad, moderado y que sea una fuente de gozo. Lo mismo en el comer y beber, la moderación honra a Dios, ¿lo hacemos moderadamente? ¿lo hacemos de forma excelente?


jueves, febrero 08, 2024

Libres del temor




Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe? Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es este, que aun el viento y el mar le obedecen?

S. Marcos 4:40‭-‬41 RVR1960


El temor y la confianza son cosas diferentes, la fe echa fuera el temor, y el temor echa fuera la fe. Son términos contrarios que no pueden ocupar el mismo lugar. ¿Cómo incrementar nuestra fe? ¿Es posible echar el temor de áreas de nuestra vida controladas por él? Sí, es posible.

2. El temor es irracional, es ignorancia. De hecho la mayoría de nuestros temores son fantasías de cosas que nunca nos ocurrirán. El principal componente del temor es una amenaza indeterminada (no sabemos qué es y eso nos da más miedo). Además, el arma del temor es el control, controla nuestras emociones, controla nuestros pensamientos y daña nuestra fe en Dios, porque le roba poder. Podemos ser libres del temor si quisiéramos.

3. La confianza crece con el conocimiento, el temor crece con la ignorancia. Los discípulos estaban en la barca con el Autor de la vida, el creador de todo, por intimidante que fueran las tormentas del Mar de Galilea, Jesús tiene el control de todo. El mar y el viento le obedecen, ¿por qué temer? es evidente que ellos no conocían al verdadero Jesús. Si tuvieran ese conocimiento hubieran dormido tan tranquilos como Él. La pregunta es ¿realmente conocemos al Jesús revelado o es sólo una pobre comprensión de Quien es Él? Necesitamos con verdadera urgencia adentrarnos en el misterio de Jesús y dejarnos asombrar por Aquel que controla tormentas. 

4. El conocimiento de nuestro Salvador desaloja el temor. Allí donde Cristo reina no hay rebeldes ni opositores. No sólo debemos conocer a Cristo Jesús, debemos someternos a Él, y debemos darle adoración en el altar interior. Un conocimiento cabal de Jesús nos lleva a reconocer su señorío sobre nosotros y a una adoración gozosa. Él es nuestro consuelo, nuestra fortaleza, y sólo si estamos bajo su autoridad estaremos bajo su cuidado. ¿Conoces al Jesús real?


La fiesta del Reino

[1] Respondiendo Jesús, les volvió a hablar en parábolas, diciendo: [2] El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de boda...