Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies.
1 Corintios 15:25 RVR1960
VICTORIA FINAL
En el plan de Dios ignoramos casi todos los detalles, no necesitamos saberlos, pero sí sabemos que su victoria será aplastante, total, completa, definitiva. Esta victoria comienza en la cruz, quitando la muerte y anulando el poder del diablo, rescatando a los suyos y trasladándolos al Reino, y se hará efectiva al limpiar la tierra, juzgar a sus enemigos, encadenar al diablo, y reinar en toda la tierra.
2. Dios quiere que sepamos lo que nos espera, nos ha abierto una ventana al futuro por medio de la cual podemos ver a Cristo Jesús reinando y entregando al Padre el reino. En aquel día parecerá como que soñamos, y nuestra alegría no tendrá fin. La paz llegará a cada rincón de este mundo, el conocimiento de Dios cubrirá todo. Cristo será glorificado y los suyos reconocidos. ¿Puede haber mayor gozo que este?
3. Se nos dice que cada enemigo será derrotado uno a uno hasta acabar con todos. No sólo se refiere a hombres, sino a enemigos de Dios, consecuencias del pecado que no eran parte del estado original del hombre, como la muerte, el ascenso de Satanás, la ferocidad de los animales, la esterilidad de la tierra, la enemistad, la naturaleza carnal corrupta. Nada de eso quedará, todos serán vencidos.
4. No hay nada mejor que ofrecernos voluntariamente a Dios, rendir nuestras vidas a Él. ¿Por qué no doblar nuestras rodillas ante nuestro buen Rey y ofrecernos al que murió y resucitó? la primera victoria de la que podemos disfrutar es la victoria de Jesús sobre nuestros corazones y nuestras mentes. Igual que el traerá paz y bendición a toda la tierra, Él también traerá paz y bendición a cada rincón de nuestro ser, reinando en nuestro pequeño mundo interior. Abramos las puertas al Rey, rindámosle honores al príncipe de paz, sea bienvenido a nuestra mente.
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