miércoles, septiembre 23, 2009

Corre por tu vida



Estos días hemos tenido en casa a una preciosa hija de Dios que está sirviéndole en uno de los sitios más oscuros de este planeta. Quisiera hablar de ella y de lo que está haciendo, pero no puedo, por su seguridad, ya han expulsado a otros misioneros de ese país.

Lo que sí quiero hablar es de algo que comentábamos anoche. Mientras la maldad, el error y la apostasía crecen, Dios está levantando a hombres y mujeres fieles, esos que no han doblado la rodilla delante de Baal, quienes está predicando un evangelio fiel, y están viviendo vidas íntegras.

Igual que en Internet podemos encontrar la peor basura y el veneno tan dañino que puede marcar tu mente, encontramos poderosos hombres de Dios con mensajes impactantes y tremendamente necesarios. El vídeo que he puesto al principio es un buen ejemplo. Gracias a Dios por John Piper, Paul Washer, David Wilkerson, etc.... en medio de la decadencia, del fin de Occidente tal como lo conocemos y en una sociedad enferma y a punto de desmoronarse, la Palabra de Dios brilla con una fuerza ultraterrena, alumbrando los corazones en pecado de seres humanos y guiándolos al verdadero y Glorioso Cristo.

En medio del desastre creemos en un Dios soberano, Quien usa todo este lío para sus propósitos y para Su Gloria. Nada derrotará a la Iglesia de Jesucristo. Nada. Ha pasado por todo tipo de hornos, anticristos, horrores (y está pasando). Ni la decadencia moral, ni el nuevo ateísmo, ni el Islam, ni la pornografía, ni el amor al mundo vencerán a la Iglesia del Rey Jesús.

Busca. Hay un importante remanente de predicadores que sólo tienen un compromiso: la verdad eterna de Dios.

2 comentarios:

Jenny dijo...

Gracias! muchas gracias por compartir!

Benjamín Espinosa dijo...

El vídeo es tan impactante como increíble. Deseo que haya muchos grandes hombres de Dios en mi generación que tengan claro su compromiso con el Reino de Dios. Y no son pocos los que conozco, pero sé que es la voluntad de Dios que haya más.

3 iglesias del Nuevo Testamento

  ¿Cómo fueron las primeras iglesias? ¿En qué sentido la iglesia en Jerusalén no tenía nada que ver con las iglesias de Antioquía o Filipos?...