domingo, octubre 14, 2007

Llegada a casa.... y resfriado

Finalmente llegué a casa, y mucho antes de lo pensado, gracias a Esteban y a su esposa, que dieron un rodeo de toda la ciudad para acercarme. Todos temíamos el atasco, pero salimos muy pronto y nos libramos de los temibles colapsos.

Estoy muy muy contento, ya que hasta el último momento he disfrutado de la compañía de hermanos, y de conversaciones muy interesantes. La familia de la fe es una gran bendición, lo único que lamento es no haber estado hoy en la iglesia, mi esposa, que sí estuvo, me contó que los niños de su clase preguntaron por mí.

Lo que sí que me he traído del encuentro es un resfriado, mi garganta, que me dió la lata el Viernes noche, mejoró muchísimos, pero estoy medio febril y con un goteo nasal constante. He estado deshaciendo la maleta, e intentando reparar el ordenador que un amigo (y hermano) de la iglesia me dió hace ya dos semanas para que reparara. Esta semana que comienza tengo trabajo en Madrid, por las mañanas estaré D.m. fuera de Madrid capital, y por las tardes en Madrid, por lo que el trabajo será bastante llevadero. Sigo repasando mis notas para el encuentro de jóvenes del próximo fin de semana en Ciudad Real... (otra vez a faltar e la iglesia, ay). Y ahora sí, amigos, me voy a dormir (Hillsong suena en los altavoces de mi ordenador).

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