Desde luego, si esperáis una meditación más o menos espiritual, lo siento....
Desde el día 11 terminé mi ingrata relación con Telefónica y pasé a la acción siendo cliente de Jazztel. Por un lado quiero reducir costes, y por otro aumentar mi ancho de banda en mi conexión a internet. Sin embargo mi andanza como cliente de Jazztel ha estado lejos de ser un camino de rosas, desde el día 11 no tengo internet, y desde el día 16 no tengo servicio de voz. Eso sí, ahora conozco a mucha gente, los amables operadores de Jazztel, con los que mantengo conversaciones cada día.
¿Y cómo estoy conectado ahora?, pues vía bluetooth, con el teléfono móvil, a una velocidad de conexión asombrosamente lenta. Espero que pronto os pueda escribir desde mi conexión de casa.
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